MOVILIZAR EN TODO EL PAÍS APOYANDO LXS JUBILADOS: Hacelo por ellxs… hacelo por vos

Desde Marabunta acompañamos las movilizaciones que se van a realizar este miércoles 11 y el viernes 20 continuando el reclamo por jubilaciones dignas. Son iniciativas de las organizaciones de jubiladxs, que cuentan para la primera de ellas con el acompañamiento de la CTA-A, la CTA-T, el FRESIMONA y la Corriente Federal de la CGT, además del acompañamiento y la solidaridad de otros sindicatos, movimientos sociales y organizaciones políticas.

Movilicemos el 11/9 contra el veto y la represión

La semana pasada tuvo lugar en Buenos Aires la radio abierta frente al Congreso contó con un acompañamiento unitario de organizaciones políticas y sindicales del campo popular. La movilización contra el veto a la Ley que mejoraba parcialmente los haberes y permitía que la mejora a los salarios mejoren las jubilaciones tuvo un apoyo extendido. Sin embargo, la ley que fue votada por dos tercios de las Cámaras (y podría quedar firme) habilita las más oscuras intrigas palaciegas por parte del Gobierno, que intenta evitar esa derrota parlamentaria comprando voluntades de radicales, peronistas y representantes de otros bloques. Es por eso que llamamos a movilizarnos con fuerza, en una medida que debería contar con el apoyo total de la CGT e incluso un paro general que fortalezca la movilización.

Preparemos iniciativas y movilizaciones para el día del jubiladx -20/9

También creemos que es sumamente importante continuar con la agenda de iniciativas que se discutió en un plenario abierto de organizaciones de jubilados. El llamado “día del jubiladx”, es otra cita importante hacia donde convocar, generar visibilidad en todos los sectores y que sea un punto de acumulación. Es una fecha con larga historia. El 20 de septiembre de 1904, pocos días antes de finalizar su mandato, el genocida Julio Argentino Roca inició el sistema de seguridad social argentino, al promulgar la ley de creación de la Caja Nacional de Jubilaciones y Pensiones para los Funcionarios, Empleados y Agentes Civiles, sobre la base de un sistema contributivo público de reparto. Si bien existían en la legislación argentina algunos antecedentes, fue la Ley Nº 4349 la que se considera como punto inicial.​ Por esa razón el 20 de septiembre se considera en Argentina como el “Día del Jubilado y la Jubilada”. Con el paso de los años el beneficio, que abarcaba inicialmente a todos los empleados y funcionarios públicos, fue reclamado y obtenido por nuevos sectores de trabajadores públicos y privados que obtendrían sus propias “cajas”: bancarios, empleados de comercio, industria, empleados provinciales, etc. Notable paradoja para el gobierno de Milei, que apologiza constantemente la presidencia de Roca y la generación del 80, pero ataca los derechos conquistados en aquellos tiempos. 

A diferencia de otras fechas (1º de mayo, 8 de marzo), este aniversario no registra antecedentes de lucha, sino más bien de “festejo”. Pero este año, el plenario realizado en Buenos Aires le puso esa fecha a una necesidad: realizar una jornada nacional coordinada que unifique y potencie el embrionario pero creciente proceso de movilización de jubiladas y jubilados. Es que la imagen de las represiones vividas el miércoles 28/8 y 4/9 recorrieron el mundo. Como siempre, el haber jubilatorio es variable de ajuste, y como nunca, ha caído por debajo de la línea de pobreza y hasta de indigencia.

Un veto indignante…

El veto presidencial al pequeño aumento resuelto por el Congreso genera aún más indignación. El argumento de Milei no es solamente económico (se quiebra el objetivo del déficit fiscal “cero”), sino claramente político: el poder se ejerce oprimiendo al eslabón más débil de la cadena de los explotados por el capitalismo. Jamás se tocan los intereses del gran capital, de los bancos, de la burguesía agraria e industrial, de Mercado Pago, en fin, de los dueños de la riqueza. De hecho, este año con el paquete fiscal el Congreso votó bajar los impuestos a la riqueza (bienes personales) y el impuesto a las ganancias a las empresas que entren al Régimen de Incentivo a las Grandes Inversiones.

…pero no el primero

A pesar de algunos pasos importantes en la mejora de los haberes y en la importante ampliación de la cobertura jubilatoria, Cristina Fernández de Kirchner vetó la ley que había sido aprobada por el Congreso de la Nación y que establecía una jubilación mínima que representara el 82% del salario mínimo, vital y móvil fijado para los trabajadores activos. El veto llegó horas después de la aprobación de la norma en el Senado, según consta en los registros parlamentarios. La mandataria justificó su rechazo al indicar que “su promulgación implicaría prácticamente la quiebra no sólo del Sistema Previsional Argentino sino del propio Estado”.

No se les cae una idea

Atacar los derechos adquiridos del llamado sector pasivo (¡que ya está demostrando que puede ser muy activo!), forma parte fundamental de la agenda de Javier Milei. Pero las medidas de afectar los derechos de este sector son una constante, no solo impulsada por la ultra derecha, sino por el FMI, el Banco Europeo y con diferentes variantes es retomada por los políticos de todos los colores a nivel local, como Alberto Fernández que suspendió la movilidad previsional en 2020 para otorgar aumentos por decreto, o las las iniciativas provinciales en Córdoba, Santa Fé y otras provincias de distintas filiaciones partidarias.

Todxs aportamos, todxs tenemos derecho a jubilarnos

El punto 9 del Pacto de Mayo, impulsado por J. Milei y firmado por 18 gobernadores de todo el país el pasado 9 de julio en Tucumán, dice: “Una reforma previsional que le dé sostenibilidad al sistema y respete a quienes aportaron.” Es la tan efectiva estrategia patronal y también avalada por el Estado de “divide y vencerás”. Pretenden que sólo tendrían derecho al sistema previsional lxs trabajadores actives registradxs. Pero toda la riqueza que se produce es social, nadie trabaja solo con su esfuerzo, sin otros acompañamientos de su comunidad, su familia y el estado. Y los recursos con los que se pagan las jubilaciones no son un simple “ahorro” de los aportes y contribuciones, sino que insumen recursos de la ANSES de la recaudación de otros impuestos: el 11% que pagamos en IVA sobre cualquier paquete de fideos, el impuesto al cheque que los empresarios trasladan a los productos que venden, cerca de la mitad del Impuesto PAIS de cada compra al exterior, y el 28,7% del impuesto sobre los combustibles que nos transportan y transportan toda las mercancías del país.

La moratoria previsional es una restitución histórica de aportes indirectos de consumo. Cualquier persona, independientemente a su género y tarea productiva (haya sido informal, cuentapropista, o realizado tareas de cuidados no remuneradas), pueda solicitar una jubilación con un plan de pagos para cancelar la deuda de aportes en cuotas mientras la perciben. Nadie regala nada: se aporta mientras se cobra.

Pero además el resultado de luchas que han dado las las mujeres, lesbianas, trans travestis y personas no binarias, trabajadoras de la doble y la triple jornada (dentro de casa, afuera de casa y en los espacios comunitarios), que han aportado históricamente al crecimiento del PBI  del mediante su trabajo en las tareas domésticas y de cuidado.

En el caso de una de las provincias más importantes (Santa Fe) ya tiene estado parlamentario la ley de reforma jubilatoria de los empleados públicos, que pretende resolver la quiebra de la Caja provincial con el aumento de los aportes de los actuales activos, un descuento adicional a jubiladas y jubilados, y una quita de derechos adquiridos a a regímenes especiales (docentes, judiciales, policías y trabajadores de la salud). La reforma habilita, también, al poder ejecutivo provincial para acoplarse por Decreto a cualquier ampliación de la edad jubilatoria que se impulse a nivel nacional. Nótese que es un Gobierno que, liderado por el radical Pullaro, ha conformado su poder abarcando (en el Ejecutivo y en el legislativo) desde La Libertad Avanza y el PRO hasta el Partido Socialista, pasando por sectores del peronismo que se han incorporado.

Un problema profundo del sistema

La cuestión previsional es un problema para el sistema capitalista a escala mundial. El crecimiento en la expectativa de vida va a contramano de la explotación y acumulación del capital, que tiene que “mantener” una masa creciente de la población mundial a la que no le puede extraer plusvalía. Por eso, en su lógica burguesa, apuesta a diversas variantes malthusianas, incluida la muerte. El gerontocidio no es un fenómeno argentino patrimonio de Milei. Es el resultado de la lógica implacable de este sistema de explotación. El término ‘jubilación’ proviene del  latín ‘jubilare’: “saltar de alegría”. Esto indica que lo lógico, lo natural y lo posible es que luego de entregar su fuerza de trabajo, una parte de la humanidad pudiera “saltar de alegría”, disfrutar de la vida, del amor, del arte, del tiempo LIBRE que bien ganado lo tiene. Es el capitalismo como sistema el que niega esa posibilidad legítima y prometida. Es el capitalismo el que concentra en un ínfimo porcentaje de grandes ricos burgueses más de la mitad del producto bruto mundial.

Construyamos una pelea igual de profunda por las jubilaciones

La movilización del próximo 20 de septiembre no debiera ser concebida sólo de jubiladas y jubilados actuales. En verdad, lxs más interesadxs debieran ser lxs más jóvenes, hoy “activxs”, que como van las cosas van a estar peor cuando les llegue la hora. Incluso habrá que ver cuántos podrán jubilarse. Esto incluye a la amplia franja de la población laboriosa, precarizada, organizada en los movimientos sociales o recluida en la subsistencia individual sin posibilidad alguna de aportes: trabajo doméstico, cuentapropistas, amas de casa. Las dirigencias de las centrales y organizaciones sindicales (salvo honrosas excepciones) acompañaron a cada gobierno de turno en este deterioro previsional. La sumatoria hay que construirla desde abajo, desde los propios lugares de trabajo y estudio, desde cada barrio, incluso desde cada familia. 

El sistema no ofrece salidas porque no las tiene

Sólo una perspectiva socialista revolucionaria, que expropie y colectivice la inmensa riqueza acumulada en las pocas manos capitalistas, puede asegurar una alternativa: Un sistema planificado entre un período de la vida de trabajo activo, y aquel período que, sin ser pasivo, incluya a la población más añosa aprovechando sus saberes y su experiencia. Más que nunca, y que en cualquier otro tema de la realidad que sufrimos, la perspectiva es SOCIALISMO o BARBARIE.

Bajo la estrategia socialista revolucionaria antedicha, apoyamos y participamos de toda lucha por mejorar el sistema previsional, defendiendo las conquistas adquiridas, incluidas las moratorias. Esta postura vale tanto para la jubilación, como para el sistema de salud. Los múltiples regímenes regulatorios que existen al respecto (nacionales, provinciales e incluso municipales) requieren de programas específicos, tanto en cuanto al haber jubilatorio (bajo el concepto general de un haber mínimo equivalente a la canasta básica del adulto mayor), como respecto a la salud pública y a las obras sociales. El PAMI en primer lugar, siempre intervenido por el poder ejecutivo nacional violando la Ley desde su propia fundación. 

Construir la más amplia UNIDAD por estos derechos es la tarea inmediata de la hora, junto con el impulso a la movilización para salir de la expectativa pasiva a la roska parlamentaria.

Por una jubilación acorde a la canasta del adultx mayor!

Ratificación de la ley de movilidad jubilatoria

Basta de represión! Protestar no es un delito

Todxs somos jubiladxs!!!